Si te gusta el folk-rock y power-pop de alta calidad no lo dudes ni un momento porque The Flamingo Bite te van a dar las dosis energética necesaria tras escuchar su segundo trabajo, titulado "Big Little Town", para el sello FOLC Records. Un álbum directo y evolutivo, conservando esas raíces propias llena de armonías y sonoridad de alto grado. Para hablar de este nuevo artefacto contactamos con Charlie componente del grupo.

Lo primero que quisiera conocer de este nuevo disco es todo el engranaje recorrido desde sus inicios hasta la salida del disco por los efectos de la pandemia.

Empezamos a grabar “Big Little Town” el verano de 2019. No teníamos sello, manager, nada. De hecho, iba a ser un EP. José Krespo (Despistaos) lo escuchó y nos dijo “Chavales, vamos a hacer las cosas bien. Estas canciones están muy bien y sacarlo a lo loco sería una pena”. Como teníamos tiempo, nos pusimos a trabajar en canciones nuevas. Llegó marzo de 2020 y todo se fue a la porra, pero nosotros seguimos trabajando en el material nuevo y tratando de mantener viva a la banda sacando singles y haciendo todo lo que estaba en nuestra mano. Lo peor fue cuando ya teníamos el disco preparado, pero no veíamos que las cosas estuvieran bien como para sacarlo y presentarlo en directo. Eso ha sido lo más duro. Por suerte, en ese periodo conocimos a Rubén de Undercover Management, que nos puso en contacto con FOLC Records y a día de hoy podemos decir que “Big Little Town” está fuera.

De haberse quedado en un disco maldito ha pasado a ser un trabajo excelentemente elaborado. ¿Qué sentimientos tenéis personalmente con la aparición de este disco?

Ha sido liberador. Somos bastante impacientes y como te decía, es muy duro tener un disco guardado en un cajón. Es cierto que la paciencia nos ha regalado muchas cosas buenas, nos ha llevado a hacer el disco que queríamos hacer y hemos ganado un montón de aliados en este tiempo, pero ha sido difícil. Cada vez que decíamos “vamos a sacarlo”, pasaba algo que nos obligaba a retrasar la fecha.

Después de hacer varias escuchas de álbum me parece que es un disco muy directo. ¿Estáis de acuerdo?

¡Totalmente de acuerdo! Desde que empezamos a plantearnos este disco queríamos que sonara más directo, más guitarrero. Creo que en el anterior EP “Two Kids Getting High” ya estábamos un poco apuntando en esa dirección. Algunas bases rítmicas del disco han sido grabadas en directo y también las mezclas de Guille han influido a la hora de conseguir ese sonido más robusto.

¿Que diferencia encontráis del primero disco con relación a este nuevo?

En “Mountains” había canciones que se compusieron cuando la banda solo éramos David y yo, trabajábamos solo con guitarras y voces. Además, estábamos en otro momento y nos sentíamos de otra forma, quizá más intimistas. Con “Big Little Town” hay mucha más cohesión en la banda, hemos tocado mucho en directo y al final el cuerpo nos pedía marcha. Nuestra seña de identidad sigue ahí y también esas canciones más íntimas. Tenemos la sensación de que es un disco más equilibrado.

¿Cuantas fases tuvo la realización y elaboración del disco?

Creo que la primera mitad de 2019 estuvimos componiendo la primera batería de canciones y grabamos ese mismo verano en muy poquitos días. A principio de 2020 estábamos trabajando en nuevas canciones y haciendo demos. Eso se alargó hasta casi el verano, que volvimos a entrar en el estudio. Ya en 2021 nos centramos en las mezclas y como teníamos tiempo, aprovechamos para depurar algunas cosas que no nos convencían a nivel de arreglos.

Globalmente considero un gran nuevo trabajo, llevando los sonidos del folk-rock y power-pop a un escalón muy alto. ¿Cómo se trabajan estos sonidos dentro del grupo?

No lo tengo muy claro, creo que tiramos mucho de intuición. Trabajamos mucho en el local de ensayo y allí intentamos llevar las canciones o las ideas que más nos emocionan. De momento no nos hemos planteado eso de “esta canción no suena a Americana, entonces fuera”. Si nos gusta algo trabajamos en ello hasta que damos con la forma que nos cuadra y si tenemos que romper un muro con la cabeza, allá que vamos. Por ejemplo “Done for a While”, al principio nos la imaginábamos como una canción de la “Motown” o de “Stax”. Por desgracia no somos negros y se quedó en una buena canción Pop.

Hay un nexo que esta patente en el disco es la correlación de voces y guitarras creadoras de unas atmósferas luminosas de gran calidad.

Desde el principio queríamos ser una banda con armonías de voz. Era algo que en proyectos anteriores no habíamos trabajado y siempre nos ha gustado mucho, además te permite hacer arreglos donde la voz es un instrumento más y como dices da mucha luminosidad. En cuanto a las guitarras intentamos ser bastante concisos, nos gusta mucho el Pop y por ejemplo, hacer un solo que se pueda tararear es algo que nos encanta.

¿Como surgió la colaboración de Ken Strinfellow para este disco?

Surgió gracias a Maite Moreno, que en ese momento nos estaba llevando la comunicación y la prensa. Quedamos un día para plantear alguna colaboración para el disco y David dijo “ya sé que es difícil, pero somos muy fans de The Posies y Ken Stringfellow”. Maite nos dijo que tenía su contacto y le escribió. Ken escuchó las canciones y nos dijo que sí, así de fácil. Obviamente le dimos carta blanca y un buen día nos pasó una pre-mezcla con todo lo que había grabado y nos quedamos flipando. Es un tío muy currante y muy serio. Además de sus proyectos personales, está siempre metido en cosas con otros artistas, ya sea colaborando como intérprete o produciendo y creo que eso es algo a poner en valor y que debemos aprender de él y de otros músicos. Por contar una curiosidad, en la parte del solo final se puede escuchar una armonía que hizo Ken que casi parece un órgano, pero que en realidad son como cinco o siete pistas de voz haciendo un acorde. ¡Es una pasada!

Aparte de las raíces americanas que contiene vuestros sonidos el pop con mayúscula también esta presente dentro del disco, grupos como The Posies, Big Star o REM entre otros, también están dentro de vuestras influencias musicales.

¡Es que el Pop está muy guay! Creo que es un género al que se le menosprecia, pero no es nada sencillo hacer una canción que en dos minutos te deje patas arriba. Sacar un buen estribillo con fuerza es una de las cosas más difíciles que hay. “September Gurls” de “Big Star” o “Solar Siter” de “The Posies” para mi son temas con los que te enamoras, no sé, de la vida cada vez que los escuchas. “Shinny Happy People” es una canción que hemos oído hasta la saciedad, pero a ver quién es el guapo que se hace semejante temazo.

El título del disco da pie a pensar que contáis una historia de una ciudad como todas, alrededor de su contorno y diversidad.

El nombre surgió en las primeras sesiones de grabación, nos resultó bastante inspirador y nos dio un trasfondo donde ubicar las historias que contamos. No se trata de un disco conceptual, pero si hay un hilo conductor. También nos ayudó a cambiar nuestro punto de vista, que como es lógico, es bastante personal y nos permitió ponernos en el lugar de alguien que nos escucha y no nos conoce a nosotros o a nuestro entorno.

¿Globalmente como definiríais este Big little town?

“Big Little Town” es darse un paseo por la ciudad siendo consciente de lo que pasa a tu alrededor. Tratando de imaginar qué pasa detrás de las ventanas iluminadas de los edificios, si ese tipo con maleta viene a la ciudad o se va, o si esa pareja que empuja un carrito de bebé se conoció en las mismas calles que tú has recorrido tantas veces.

Otra parte indispensable de una banda son los directos. ¿Cómo vais a afrontar The Flamingo Bites las presentaciones del disco?

Lo afrontamos con mucha emoción, echábamos mucho de menos el directo. Ya hemos hecho el primero en nuestra ciudad, en el Madrid Sonora Festival. Van a ser conciertos muy enérgicos donde, además de presentar nuestro nuevo disco, echaremos la vista atrás y tocaremos temas de nuestros anteriores trabajos e incluso hay alguno que reinterpretamos de una manera diferente.

Dos palabras destacaría de vuestros ocho años de andadura musical para llegar hasta este 2022 con este nuevo trabajo como son madurez y solidez en donde demostráis esa conjunción de un grupo en vuestras composiciones y sonidos.

Muchas gracias. Desde luego, estamos muy contentos y orgullosos con el resultado y aunque la espera ha sido dura, creemos que ha valido la pena. Por otro lado, no queremos quedarnos solo aquí, queremos hacer más canciones y seguir mejorando y disfrutando de esto que tanto nos gusta. Intentaremos que nuestro siguiente trabajo sea aún mejor.

Autor: The Profe