Quien tuvo retuvo. Así podríamos titular esta nueva reunión de los holandeses, formación clave para comprender la fusión de rock y rap que se vivió durante la década de los noventa. Rudeboy, vocalista de Urban Dance Squad, para la ocasión se ha rodeado de un buen puñado de músicos, incluyendo a otro antiguo miembro, DJ DNA a los platos.

Sonaron compactos y contundentes, como era tradición en una banda de sus características, y los versos de Rudeboy se vieron arropados por riffs incendiarios y samplers constantes, aunque estos últimos en ocasiones quedaban disimulados por los instrumentos de la banda. Las dimensiones del escenario impidieron un mayor movimiento del vocalista pero dejó claro que a pesar de su menudez se crece en escena.

Abrieron con “Good Grief”, “Wino the Medicinemen” y “Mugshot”. No faltaron tampoco otros hits del calibre de “Alienated”, “Artantica”, “Deeper Shade of Soul”, “Struggle for Jive”, “Happy Go Fucked” o “Demagogue”. Dejaron para el final el cosmopolita “Bureacucrat of Flaccostreet”. Un hora y media que nos devolvió a la década dorada de la fusión musical noventera pero, en el caso de los de Utrecht, manteniéndose tan vivos y actuales como su música. 

Autor: Rafa García-Moreno