El cuarto trabajo discográfico de Medalla ha llegado a las tiendas de discos bajo el título de Duelo. Los barceloneses Eric Sueiro, Marc López, Joan Morera y Josep Peris nos presentan trece temas contundentes y compactos de rock oscuro, psicodelia abrasiva, metal y baladas con orquestación. Un trabajo que engancha tras la primera escucha y que esconde sorpresas como “Jardín de Puñales”, “Duelo” o “Umbral de sueños”.

Os habéis lanzado a la autoedición con este cuarto disco, ¿a qué se debe ese paso tan arriesgado en el mundo de la música?

Para nosotros no fue arriesgado, porque veníamos de una cierta trayectoria y teníamos más o menos claro que, por muy mal que fuese, nos sería relativamente rápido recuperar la inversión de la autoedición. Tenemos la suerte de tener una comunidad en torno al grupo que nos compra los discos y vienen a vernos a los conciertos, eso hace que todo sea más fácil.

¿Tenéis previsto publicar a otras bandas?

Sí, de hecho ya lo estamos haciendo. Estamos ayudando con la distribución digital a muchísimas bandas que nos flipan y que encajan con la filosofía del proyecto. En la web de Estudio Mazmorra se pueden ver: https://estudiomazmorra.com/mazmorra/

También me sorprende que os habéis encargado de la distribución, una tarea titánica.

Esto no fue algo que estuviera previsto. Intentamos distribuir mediante una distribuidora de discos a tiendas pero al ver los números nos echamos atrás rápido y decidimos hacer un trabajo de escribir a cada tienda que pensamos que sería afín con el proyecto y preguntarles si querían tener copias para vender. La respuesta fue súper positiva, hicimos un hilo en Twitter y mucha gente nos comentó que se apuntaba todas las tiendas para sus proyectos. Hemos enviado discos a tiendas de Catalunya, Madrid, Granada, Comunitat Valenciana, Gran Canaria y Valladolid.

¿Dedicaros a todos estos menesteres no puede mermar la faceta más musical del grupo?

No te vamos a negar que estos meses han supuesto muchísimo trabajo, pero ahora con retrospectiva no nos planteamos dar marcha atrás y hacer las cosas de forma diferente en el futuro.

Este nuevo trabajo es un disco menos ecléctico que los anteriores.

Sí y no, quizá hay menos géneros y el espectro musical es un poco más cerrado, pero cada canción tiene partes que viajan mucho entre diferentes registros. Por ejemplo, en “Jardín de Puñales” empezamos haciendo rock con tintes flamencos, después psicodelia espacial y terminamos rindiendo pleitesía a los dioses del metal.

“Jardín de Puñales” suena contundente.

El rock, o lo haces o no lo haces.

Además os habéis permitido el lujo de incluir guitarras acústicas.

Esto es algo que llevábamos tiempo queriendo hacer pero por falta de tiempo en el estudio nunca habíamos hecho. En el estudio de grabación nos gusta jugar con más instrumentos y enriquecer la musicalidad de todas las canciones. En directo no lo podemos replicar, pero da absolutamente igual porque tocamos con tanta energía que no te vas a dar ni cuenta de que faltan instrumentos que suenan en el disco.

Incluso habéis invitado a Valdivia a colaborar en “Duelo”. Ha quedado muy chulo el tema con tantos arreglos.

¡Gracias! Seguramente sea el tema menos representativo del sonido del disco pero el que más engloba el mensaje de todas las canciones. Es una canción súper especial para nosotros y muy emotiva.

Las guitarras y el bajo en general suenan muy potentes.

Esto es mérito de Sergio Pérez García (SVPER), nuestro productor. También un poco nuestro porque somos quienes tocamos los instrumentos, pero sin su saber hacer y su magia no sonaría igual el disco, desde luego.

Las letras, si no me equivoco, han perdido el compromiso político de antaño.

En este disco no tenía ningún sentido incluir canciones que se desviaran de la temática principal, que es la gestión emocional del duelo. Creemos que esto tiene también algo de político, porque hablar de lo que se te remueve por dentro al vivir tanto dolor no deja de ser un acto político en sí mismo. No obstante, tenemos un mensaje. No os preocupéis, que el compromiso con las canciones a degüello sigue intacto y en el futuro volverá de forma más contundente aún.

Fotografía: Lidia Arruego 

Autor: Rafa García-Moreno