La verdad es que no conocía los anteriores discos en solitario de Charlie Simpson y el descubrimiento de este tercer disco ha supuesto una bocanada de aire fresco para mí. El cantante y compositor se dio a conocer la pasada década con el grupo de punk-pop, Busted. Eran una banda ideal para fans de grupos como The Undertones o Buzzcoks, aunque también cuidaban sus armonías vocales como los mismísimos Beach Boys. Charlie lo dejó en 2005 pero el año pasado hubo una celebrada gira de reunión tras la que Simpson ha sacado este nuevo disco. Quizás se pueda pensar que está hecho a base de retales, pero vaya retales. Las canciones nuevas, re-grabaciones y versiones están escritas y grabadas a lo largo de lo que llevamos de década. Un periodo en el que ha logrado hasta 4 números 1 y se ha hecho acreedor de un Brit Award. El primer tema es la recuperación de su exitoso 'Emily' , del disco "Long Road Home" del 2014. Viene en clave acústica y bebe del Bruce Springsteen del "Nebraska" o del más intimista Bon Iver. El tema titular tiene una preciosa melodía y unos excepcionales coros, además de contar con unos exquisitos arpegios de guitarra acariciada. El toque africano de 'Walking with the sun' es un gran acierto también y me gusta la versión que hace del gran 'Barricades of heaven' de Jackson Browne. en 'Parachutes' tenemos preciosas acústicas y un buen piano y te puede recordar de nuevo a Bon Iver, pero también a nombres más clásicos como Cat Stevens o incluso The Blue Nile. Y aquí llega otra grata sorpresa. Su versión del 'Re:Stacks' de Bon Iver es una gozada absoluta y la sensación de desolación que produce logra emocionar a cualquiera. Suena más alegre y soleado en la re-grabación del 'Long road home', una preciosidad con estupendos coros que puede gustar por igual a los fans de Mumford & Sons que a los de The Frames o Glen Hansard en solitario. Otro artista al que parece admirar Charlie, por su sonido es Micah P. Hinson y de hecho el disco se cierra con el 'The day Texas sank to the bottom of the sea' del mismo. Suena tan triste y tan bonita como el original de Micah. ¡Un gran compositor e intérprete que va hacia arriba con clase y buenas canciones! 

Autor: Txema Mañeru