Entrevistas
19-02-2024
Femur, azotacalles de bandera
Nueva incursión musical de King Jartur con la edición del tercer trabajo de Fémur que, bajo título de "Gritan", nos conduce nuevamente por los sonidos energéticos del garaje. Doce temas propios mas dos excelentes versiones demostrando su línea ascendente en cada trabajo que saca al mercado discográfico.
Fémur se inicia dentro del confinamiento que tuvimos hace varios años ¿Cómo surgió la idea de crear Fémur?
Estaba involucrado en otro proyecto en el que tenía un excedente de canciones que no encajaban. Cuando me ponía a componer me salían todos los sonidos y canciones más punk y garage psych que todo lo que había hecho. Quizá por rabia, el hecho de estar encerrados, las ganas de gritar y hacer crítica social… Así que me encerré en el local a grabar canciones y hacer letras que tenía en mi cabeza, dando candela al momento histórico que estábamos viviendo y reflejar la sociedad tal y como la veía. Las canciones empezaron a sonarme de tal manera que hice unas llamadas para ver qué le parecían a algunos conocidos de la escena que no dudaron en animarme a seguir haciendo cosas así y cerrar un proyecto que acabó siendo Femur.
¿Qué inquietudes garageras te influyeron en esos momentos?
Estaba muy metido en el sonido punk rock tardío de los 70 y bandas del midwest londinense y el garage revival de los 80. Sabía que había mucho que rascar, pero una vez que te adentras a investigar en los 80 hay una barbaridad de grupos y bandas oscuras, de las que no tenía ni idea de su existencia. Ha sido un trabajo de investigación y escucha sin cesar.. También cosas 60s aunque en menor cantidad que años atrás. Hace un par de décadas estaba muy metido en el rollo 60s mod psych. Las indagaciones y ganas de conocer más bandas y sonido me han hecho gastar mucho dinero en discos. Soy muy de tener el vinilo en casa, escuchar los discos una y otra vez. Cuando me gusta un disco, no me importa ponerlo y volverlo a poner y volverlo a poner.
Con esta nueva referencia "Gritan" ya son tres los larga duración de este proyecto musical. ¿Cómo ha sido la evolución de Fémur con cada disco editado?
Comenzó como un grito a la sociedad, una crítica. Mezclando el arte de la canción protesta con el caradurismo, el macarrismo y la mamarrachez. Dándole altas dosis de fuzz y potencia desgarradora en los gritos y lamentos, que los hay. En el segundo disco, di una vuelta de rosca más y empecé a hacer sátira y jugar con la metáfora. Soy amante de pelis de terror y monstruos antiguas. Si miras bien puedes encontrar similitudes entre los monstruos que salían en pelis de Hammer y Universal con los políticos de ahora o mucha gente de a pie. Ahora todo el mundo es un Dios y creo sinceramente que el endiosamiento general es un error que nos está pasando factura desde hace ya tiempo. Hay una línea muy fina entre el endiosamiento y la estupidez que hacen ser, a muchos, un gran villano de tomo y lomo. Lo peor es que va a más. Y ya sales a la calle incluso con miedo. Esto es algo que no había notado ni sentido hasta hace realmente poco tiempo. No me gusta estar fuera y mira que he sido un azotacalles de bandera.
Una cosa está clara, tu lo haces todo en cada disco que realizas, tocas todos los instrumentos con alguna colaboración. ¿Cómo es el proceso de creación que te marcas en cada disco?
Siempre agarro ideas tras haber pasado alguna situación, algún episodio malo o cómico personales, viendo alguna película… Empiezo a entrelazar todas las cosas creando historias y personajes que intento meter en melodías que poco a poco vienen apareciendo en la cabeza. Grabo unas bases de guitarra a las que añado un bajo y percusiones. Cuando tengo esta base arreglo lo que haya descolocado, porque es un grave error grabar la guitarra antes que la base rítmica y aunque lo hago con metrónomo a veces es una maravilla, pero otras es un gran enemigo. Grabo una voz principal y comienza la lluvia de ideas para arreglos, coros y demás. Los teclados a veces son muy importantes y para ello cuento siempre con Pablo Junquera que ahora forma parte de la banda, porque tenemos banda física. Sí.
¿Qué planteamientos te marcaste para la elaboración de este "Gritan?
El que no pasara mucho tiempo entre el disco anterior y “Gritan”, era un punto importante. Cuando hay cosas que decir y salen mejor que en anteriores ocasiones, creo que no hay que guardarlas en un cajón. Hay que sacarlas adelante. Y es por eso que lo sacamos. De hecho hemos juntado banda para poder defender el directo de Femur cuando tengamos que salir a hacerlo.
¿Qué tiene la Tiki-Mansión para las grabaciones de Fémur?.
Estamos en casa, con las comodidades que ello ofrece. No es un estudio profesional. Pero de aquí sale todo lo imprescindible. No queda aquí nunca la cosa. Llevamos dos discos trabajando con Fernando Pardo que remezcla y masteriza todo lo grabado y producido en la Tiki Mansion.
¿Por cuantas fases pasó el nuevo disco y qué lineas te marcaste en la grabación?
Es un proceso bastante arduo, en cuanto a que no hay unos ensayos y unos días concretos de grabación, por lo que se convierte en muchas ocasiones en algo demasiado espeso y fácil de acabar con la paciencia de cualquiera.
La cuestión es que no te limitas en tiempo ni estás con un reloj diciéndote que te apures, por lo que grabamos o lo hago cuando siento que tengo que hacerlo. Cuando estoy con presión no suelen salir las cosas, al menos como a mí me gustaría. Por lo tanto es un proceso que lleva su tiempo. Cuando termino mi tarea y paso el material a estudio, intento no ser pegajoso ni pesado con los tiempos. Prefiero que vayan sin presión y hagan lo que tengan que hacer, pero bien hecho.
Un disco en donde tus composiciones poseen la energía necesaria para dar ese toque de agresividad en cada instrumento. Háblame de "Cerberus" y de "La extraña Chica".
Cerberus es una de esas sátiras, está hablando de un yo interior que sale a ladrar y morder a todo el mundo porque no hay quien respete nada, pero detrás de esos dientes, ladridos y berridos se esconde un perrillo que se deja acariciar y que no tiene maldad alguna. Es un ladrador poco mordedor.
La extraña chica es una de esas citas que crees maravillosas pero se tuercen a algo extravagante, tóxico y sin un final feliz. Excesos, diversión y poca chicha.
En este disco metes dos versiones tanto de Chesterfield Kings y otra de un clásico del garage de los sesenta,¿Como elegiste estas dos versiones?
“Vivo en el cementerio” es una canción que me ha vuelto loco desde que tengo 16 años, si no recuerdo mal y que encajaba a la perfección con lo que Femur quiere proyectar en cuanto a sonido, estética cancionero. No podía pasar sin intentar hacer una versión adaptándola al castellano.
En cuanto a “Ella Mintió”, es un clásico de Chesterfield Kings que en innumerables ocasiones, sin venir a cuento, aparece en mi cabeza y voy tarareando interiormente. Así que también quise hacerla un poco más de Femur y la adapté con una letra del imaginario teenager-pop que ha marcado un sinfín de generaciones en la música. El desamor.
Arturo ;¿Que dedicación te exige Fémur?.
Es algo que no hago a disgusto para nada, todo lo contrario, por lo que no me molesta dedicarle tiempo. Sí le dedico pero de buena gana. Ahora con banda es cuando empiezan a surgir las locuras y las sagradas escrituras para marcar una fecha en cada ensayo. El día a día del músico, “no profesional”.
Pero la recompensa está en oír estas fenomenales canciones llevadas a lo largo de todo los surcos del vinilo.
Muchas gracias. Es un estilo que he escuchado desde que tengo 14-15 años en más o menos cantidad según temporadas, pero en definitiva el estilo que me volvió loco de joven y por el que sigo haciéndolo. Ver que hay gente que sigue las cosas que haces, que le gustan tus canciones, que se interesa por ello… Te llena (en mi caso) de ganas de seguir haciendo cosas.
Habrá algún día presentaciones en directo del disco.
Nos encantará presentar el disco allá donde quieran que vayamos a hacerlo.
El grupo está formado con la intención de salir a defender lo que suena en los discos y así trataremos de hacerlo. También estamos trabajando nuevas canciones y en las próximas grabaciones ya intervendrán el resto de la banda, por supuesto. Son unos grandes músicos con unos cuantos años de experiencia y el culo pelao en diferentes escenarios. Tenemos a Pablo de Magic Bus y Blackbirds, Juanjo de las Aspiradoras y Sali de Los Hidrocálidos y King Jartur & His Lords.
¿Cómo definirías este nuevo disco desde tu pensamiento global?
Un must. Es un disco que deberías tener en casa si te gusta el garage revival 80s 90s. Creo que es un disco a reivindicar, sin ñoñerías ni sonidos modernos. Un montón de canciones crudas con una barbaridad de Fuzz, mucha pegada y juegos en letras muy trabajados. Las ilustraciones de las portadas hacen de él una maravilla visual, de manos del artista Roberto Argüelles. Creo que el que se lo está pensando, debería dejar de hacerlo y pillarlo sin esperar ni un día más. Las radios en Francia, UK, Holanda… lo están pinchando un montón y eso es que hay djs que les gusta. En cuanto a la globalización y lo que se nos vende ahora, si era eso lo que preguntabas, igual no vale mucho.
¿Qué nos puedes aportar de la situación actual de los demás proyectos en donde participas?
Las Aspiradoras es una banda que puede hacer muchas cosas. Está en un montón de festivales anualmente y es una banda que gusta a mucha gente. Me gusta mucho tocar con ellos y viajar. Son una familia con la que convivo y donde suelo encontrarme muy cómodo.
¿Tienes pensado un nuevo disco para el próximo año?
En realidad sí. Estoy trabajando en él desde hace ya algún tiempo. Hay un montón de canciones maquetadas. Pero hay mucho trabajo aún por delante. Ahora con la nueva banda hay que grabar más cosas, escuchar más opiniones y trabajar en grupo. De todo lo que hay luego siempre hay que desechar algunas cosas que no están a la altura o que me parece que quedan más flojas y no dan la talla. Me encantaría que lo pudiéramos terminar este año, claro está, pero depende mucho de lo que se tarde en grabar todo lo que hay, que no es poco. Hay que ajustar mucas ideas, arreglos de unos y otros… y de momento como te digo, aunque el proceso ha empezado, aún son solo bocetos y esbozos.
Arturo que destacarías para finalizar del garaje actual a nivel nacional e internacional.
Es algo peliagudo. Porque creo que está en auge y de forma muy notable. Pero no estamos en los 90. Eso se acabó. Hay muchas bandas, pero se consume muy poca música. Hay muchos discos que no se venden y esto hace un embotellamiento de mucho género que se queda en el tintero. Hay cosas que deberían sonar más en radios y otras menos (desde mi humilde opinión/gusto musical) Estamos en una etapa en la que hay muchos festivales que dan visibilidad a muchos grupos, pero en cuanto al consumo de música en sí hay una decadencia muy generalizada generada por plataformas como Spotify. Tenemos acceso a todo, lo cual es muy bueno, pero hay tanto que es demasiado. En cuanto a bandas nacionales que me gusten a mí, destacara a Braindrops, Las Aspiradoras y Doctor Explosión han vuelto a hacer ese tipo de conciertos que hacían hace 20 años y vuelve a ser divertido verlos hacer el salvaje. Smoggers es una banda que no paran de tocar, moverse por todas partes y sacar discos, la sinvergonzonería de Los Ignorantes me encanta, Lie Detectors creo que están a un nivel muy pro… Y en cuanto a internacional me vuelven loco The Jackets. Creo sin lugar a dudas que es la mejor banda que existe en este momento en cuanto a sonidos garage sixties punk psych o cualquier vertiente. Siendo trío, en directo son una apisonadora sin fisuras de ningún tipo. Al otro lado del charco me encanta el sonido de los Wild Gooms, creo que es un sonido fantástico y su actitud y estética juvenil dice mucho a su favor.
Autor: The Profe