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28-05-2018
Arctic Monkeys y el estigma de la evolución
Si te dicen que Arctic Monkeys va a publicar nuevo disco después de tanto tiempo en silencio y conociendo la trayectoria guitarrera y potente de la banda, tal vez estés pensando en otro disco lleno de mega hits, guitarras eléctricas, ritmos pegadizos, canciones de botar y botar una y otra vez… pero tengo que decirte que estás muy equivocado. Tu pensamiento es nulo y arcaico, porque esta joven banda que ha disfrutado de cañonazos como I Bet You Look Good on the Dancefloor, Brainstorm, Brick By Brick o Do I Wanna Know? ha madurado y sí, también ha cambiado.
Algo que no soportan los seguidores de una banda a la que siguen férreamente y con devoción es que cambien. No aguantan que la banda a la que han seguido desde sus inicios de repente haga un disco totalmente diferente. ¡Cómo es posible! ¡Cómo ha podido ocurrir! ¡Qué les ha pasado! ¡Ya no suenan como antes! ¡No son lo que eran! Son las voces que empiezan a zumbar cual abeja cojonera. Y es que por desgracia, el ser humano es desagradecido. No sabe valorar que por un tiempo esa banda le regaló momentos maravillosos y olvida con facilidad todo ese santuario musical sólo porque ya no suenan cómo lo hacían hace diez años y no le remueven de la misma manera.
Me asusta la gente que no cambia, que no crece, que no evoluciona. Si no sabes añadir más cosas a tu vida, siento decirte que estás jodido. No quiere decir que hayas cambiado de gustos musicales o sí, pero con el tiempo se suman nuevas influencias y con ello siguen aumentando nuestros gustos, preferencias, inquietudes...en definitiva, nuestro ser. Así que yo apuesto por esas bandas que son capaces de añadir esas nuevas inquietudes, llevarlas a su persona y crear algo nuevo.
Arctic Monkeys han vuelto con nuevo álbum Tranquility Base Hotel & Casino, un disco totalmente diferente pero absolutamente fantástico. Nos despedimos de lo eléctrico y cañero para dar entrada a la sutileza, elegancia e introspección. Un disco que tal vez a la primera escucha no te diga mucho, pero tras la tercera empiezas a descubrir pequeños detalles que lo convierten en un gran trabajo. Desde mi punto de vista, este es el requisito que necesito para saber si es un buen trabajo o no, que no se queda en esa canción que es el super hit del disco que escuchas hasta la saciedad una y otra vez y que después de un tiempo se percibe desfasada. Este álbum es un todo, un conjunto y como tal, completo y absoluto. Así que, que siga la evolución.
Fotografía: Zackery Michael
Autor: Cristina Sánchez García